Ahora que me encuentro aquí
con el corazón palpitante de recuerdos,
bajo la sombra de éste firmamento de estrellas exorbitante...
Bajo las sombrías hojas de los árboles,
ahora que mi silueta se pierde en ellas, tengo el pasado
bien presente en las esquinas de mi insospechado futuro.
Ahora que el viento es quietud amarga y fresca,
tengo el códice de mis recuerdos enmarcado
en las lineas rectas de mi vida
Ahora que estoy sola en la imponencia de este campo gris
cruzo las piernas de mis recuerdos sabor tabaco
sabor a desteñidas amistades falsas
Ahora que recuerdo momentos insignificantes
e insanos que no conforman nada de lo que soy
solo hablan mal de mi y de las lunas que te esperé
tanto triste tiempo.
No, no, no...
No es un poema de amor, sólo es una basca
de las memorias que me saben a hiel
a pesar del soberbio e impetuoso paisaje.
